domingo, 4 de noviembre de 2012

In memoriam padre Ximo

He tenido la gran suerte de coincidir con él en la noble tarea de la Pastoral Penitenciaria, y me quedo, para siempre, con su sonrisa. Cualquiera que tenga relación con el medio penitenciario torcerá la cabeza cuando lea lo de “sonrisa”. Pero parece que Dios escoge cuerpos pequeños para meter en ellos almas grandes. Como era menudito, la definición más omnicomprensiva del Padre Ximo era su sonrisa. ¿Como se puede sonreír tras cuarenta años al servicio de los presos? Según la teoría de no se qué teólogo más sabio que yo, el dolor que vas viviendo se te acumula, te desborda, y llega un momento que te rompe. Eso cuando eres una persona normal, con algo de humanidad. Pero eso no le sucedió a él porque su sentido de la trascendencia era muy superior al común de los mortales. Porque su voluntad de servicio le pudo al dolor con el que convivió y en el que había de sumergirse para tratar de ayudar al prójimo privado de libertad.
 
Conozco a Samba, un africano a quien bautizó el Padre Ximo en la prisión, y preparó para la primera comunión. Pocos internos comulgan con la devoción que lo hace éste, a pesar de estar enfermo. Muy enfermo. Tiene sida, sífilis y tuberculosis... pero es que los predilectos del Padre Ximo eran los de la enfermería. Y no es que solo se preocupara de la salus animarum de su grey, ni mucho menos, si no ahí está la anécdota del día que estaba intercediendo por uno ante el Juez de Vigilancia Penitenciaria y como dieron las doce dijo:
 
·                     Si no le importa... señoría... El ángel del Señor anunció a María...
Y rezó el ángelus.
 
Cuando nuestro actual arzobispo visitó por primera vez la cárcel de Picassent, en un momento de la visita, le dijo:
·                     Don Carlos, venga, que le quiero enseñar a un preso muy especial...
Y lo llevó a una celda donde hay una silla y un sagrario. Ese sagrario está allí gracias a él.
 
Lo conocía mucha gente, mucha, mucha. Y todo el que lo nombra evoca un recuerdo grato.
 
Él nos esperaba todos los domingos después de decir la misa de la enfermería a que saliéramos nosotros de los módulos de cumplimiento para irse con el Padre Javier. Salía de debajo de un árbol en el jardincillo, con su sonrisa, como si dijera: en la Modelo no había jardín. No echaré de menos esa expresión feliz porque sé que sus frutos están ahí y su ejemplo nos edificará siempre, pero, sí que, con permiso de San Juan de La Cruz le diré como
 
Pasó por estos sotos con presura
y, yéndolos mirando,
con sola su figura
vestidos los dejó de hermosura.
 
En haber coincidido con él en el servicio toma cuerpo la comunión de los santos y me siento feliz de haberlo conocido. Poco más te podré decir, amable lector. Ha muerto una persona grande de la Iglesia Universal. De aquellas que no hacen ruido, pero que constituyen esa insondable riqueza de gracia con la que Dios agasaja a los que saben apreciar una vida de servicio a quienes en verdad necesitan ayuda, porque esa ayuda la ha sabido convertir en apoyo y éste lo transformaba en cariño.
 
Ninguna otra cosa menos bella puedo decirle, porque tengo la certeza absoluta de que él ya ha oído esas otras palabras:
 
¡Ven, bendito de mi padre, porque estuve preso y viniste a verme!
 
  

Mariano Jiménez Ambel
Voluntario de SEPVAL

lunes, 1 de octubre de 2012

Partido en el módulo 1 de la Unidad de Cumplimiento

Esta mañana (22-9-12), y dentro de los actos programados por la Pastoral Penitenciara con motivo de la Fiesta anual de la Virgen de la Merced, se ha celebrado el partido amistoso entre los jugadores del Módulo 1 y los del equipo de la parroquia Nuestra Señora del Pilar de Catarroja.

Después de los pertinentes trámites a la entrada, acompañados por Guillermo, se añade al grupo Pepe, el cual con la preceptiva autorización para la celebración del acto de convivencia, tramitan el pase por el 2º y 3r control, antes de entrar en la zona definitiva de "cumplimiento".

A través del interminable pasillo, hemos accedido a la "rotonda", sobre la cual está ubicada una de los torres del centro. Desde allí, hemos accedido ya al pasillo de acceso a los diversos módulos, llegando al que era nuestro destino: el M-1 "Proyecto Hombre".

Después de presentar la documentación pertinente a la funcionaria, hemos accedido a una zona donde se han podido cambiar los chicos de fuera. Una de las partes más entrañables ha sido el encontrarnos con los internos que iban a ser, algunos de ellos, los oponentes en este partido.
El mismo ha comenzado a las 10,30, con una primera parte de 30', un descanso de 5' y el resto del mismo con otros 30'. El resultado ha sido de 19 - 5, a favor de los jugadores del M-1. El encuentro ha sido una muestra de maestría en el juego por ambas partes, respeto por el contrincante, aplaudiendo las jugadas y goles de uno y otro equipo.

Los cambios reglamentarios entre jugadores se han respetado durante todo el partido, y el caso del árbitro ha sido lo más curioso. Después de buscar afanosamente al árbitro, se ha pactado que el mismo sería pitado por un componente de cada equipo, y aunque en casi todas las faltas ha habido unanimidad, se ha dado un buen entendimiento.

Al final del partido se ha hecho entrega de un balón firmado por los componentes del equipo de Catarroja, así como del balón con el que se ha jugado, y una copa, tanto al vencedor, como al 'segundo' clasificado.
Después nos hemos podido refrescar con una buena ducha, y desandar al camino de entrada, y pasar los controles 3º y 2º.

Nuestro agradecimniento a todo el personal que nos ha atendido, funcionarios, amigos, voluntarios y jugadores. Todos hemos percibido y vivido ese espíritu "especial" que tiene este módulo 1 de "Proyecto Hombre". Nuestros mejores deseos para todos.
 
ANÉCDOTA:
"Uno de los jugadores de del equipo de Catarroja, llevaba una camiseta del Hércules de Alicante, y uno de los jugadores del equipo del módulo 1, seguidor del Hércules, le comentó, que cómo era que llevaba esta camiseta. El de fuera le contestó que era natural de Alicante, y coincidieron en que habían nacido en el mismo barrio, y estudiado en el mismo colegio, aunque en distintos cursos y años. Preguntando el jugador del M-1 a qué se dedicaba este jugador del equipo de Catarroja, uno de los presentes, que les acompañaban desde la entrada, le contestó que trabajaba con pasaportes, aclarándole al final que trabajaba con pasaportes, para intentar llegar al cielo, ya que este jugador de Catarroja, era el cura de la parroquia de Ntra. Sra. del Pilar". El interno quedó gratamente sorprendido al conocerlo.

Pepe Arcís, voluntario del SEPVAL

domingo, 30 de septiembre de 2012

Punto de Orientación Jurídica del SEPVAL

Este artículo, está dedicado a Raquel, para darle la bienvenida, y, si cabe,
aumentarle la ilusión con que se ha incorporado.

 

 

Así trabaja el departamento jurídico de la Pastoral Penitenciaria

 

Estaba muy preocupado por el juicio de Berta. La causa era muy compleja, de los diez procesados había algunos en paradero desconocido y otros sin notificar. Pensaba que, inevitablemente el juicio no se celebraría, lo cual suponía que ella iba a seguir presa en preventivos hasta ni se sabe. Me daba rabia, porque tenía una buena defensa. Ella había actuado de secretaria, pero jamás había tomado dinero de ninguno de los estafados. Y sí, lo que ella hizo fue levantarles unos miles de euros a los estafadores, pero de eso no la acusaban, así que por virtud del principio acusatorio a ella no la pueden condenar por algo de que no la acusan. En realidad ella llamó al 112 a denunciar el asunto, y luego a la policía. Dos veces, pero, curiosamente, esas llamadas no estaban transcritas en el sumario. “No tenían contenido relevante”, decía la propia policía. Le pedían seis años. Estaba encerrada desde Junio de 2010.

 

Yo la conocí en el coro de Capellanía, donde cantaba. Me contó que “no tenía abogado”, porque el que tenía de oficio no iba a verla ni sabía nada de él. Lo llamé y me decía que el asunto era gordo, que había mucho tomate... no le costó mucho darme la venia. Inmediatamente le recurrí la fianza. Se la rebajaron a la mitad, pero ella no tenía ni un euro. No podía pagarla

 

Yo sí creía en la inocencia de Berta, pero ahora se acercaba el juicio y aparecía el fantasma de la suspensión. De todas formas estaba la acusación de asociación ilícita. Cuando se convocó la primera sesión bajé a verla a calabozos y le pregunté porqué se había juntado con aquella gente.

 

Mi exmarido me obligó. Me pegaba.

 

Me subo, más que atacado, incendiado, a hacer pasillo en la puerta de la Sala. Corrillo de abogados con toga puesta:

 

¿Tú eres el abogado de Berta?

Si.

Hola, hombre.

No comprendo porqué ella está en la cárcel y estos están aquí...

Sí, la verdad es que tienes razón...

Ella no ha hecho nada y no puede pagar la fianza

Bueno, vamos a ver, espérate.

¡Deberían de pagarle su finaza!

 

Se va al grupo de los extranjeros, vuelve:

 

Sí, ellos van a pagar la fianza

Parece que el fiscal está proclive a un acuerdo. Si pagan 20.000 euros, pedirá dos años a todo el mundo, y …

¡Hombre, eso está muy bien!

Pero necesitan tiempo para reunir el dinero...

Bueno, pero a Berta hay que ponerla en libertad hoy...

 

Entramos a hablar con el fiscal. Efectivamente, es proclive al acuerdo.

 

Pero a esa chica hay que sacarla de la cárcel.

Bueno, yo no me opongo a su fianza.

Voy a ofrecer 750 euros...

Esta bien, es la mitad...

Bueno, pero para lo otro necesitamos tiempo...

Bien, suspendemos.

Sí, pero Berta a la calle.

Bueno, entramos en sala

Que pasen los acusados.

 

Traen a Berta los dos policías de rigor, me siento a su lado y le digo.

 

No te preocupes de nada ahora. El juicio no se va a celebrar, pero tú te vas a ir a la calle.

 

Se le iluminó la cara, y me subí al estrado.

 

Como el Presidente no estaba dispuesto a empezar el juicio, porque sabía de sobra que no era posible concluirlo en el plazo legal de un mes, suscitó las cuestiones previas.

 

Solicito la inmediata puesta en libertad de Berta, mi defendida, y para ello ofrezco una fianza de setecientos cincuenta euros.

¿Que dice el Ministerio Fiscal?

El Fiscal no se opone, es la mitad de la acordada.

 

No hubo que insistir mucho en convencer al Presidente de que cerrara allí el acto y citara, una vez ordenadas las buscas, para otro momento. Me dijo que a lo largo del día resolvería por auto.

 

La verdad es que, sin nadie preso, ya no hay inconveniente en alargar la espera hasta seis meses. Los abogados de los extranjeros les van a decir a ellos que un mes, para forzarles a buscar el dinero.

 

Al acabar la mañana tenía el auto de disminución de la fianza, y había quedado con el compañero en vernos al día siguiente en Banesto para depositarla. Quedamos a las nueve, yo estaba media hora antes. Hicimos el ingreso, y me subí a la Secretaría. Era el día de la huelga general, había poca gente, y, naturalmente, la que llevaba mi asunto, no estaba. A la compañera que me atiende se lo explico:

 

Es que la interna ya sabe que va a salir, y si la dejamos allí un día más le da un ataque...

No, pero yo no puedo hacer nada porque el Secretario no está y eso lo tiene que hacer él...

Bueno, pero vamos a intentarlo. Le dejo el original de la consignación de la fianza...

 

Me voy, y a la media hora me suena el teléfono:

 

Que ya puede venir a firmar la comparecencia...

¡Voy para allá!

 

Debí convencer a la funcionaria, porque cuando llegué la comparecencia ya estaba firmada por el Secretario, antes de que la firmara yo.

 

Faltaba Picassent.

 

Berta me había escrito una carta diciéndome que, cuando saliera, por favor fuera a recogerla, porque tenía muchas pertenencias... y nadie que fuera a por ella.

 

Así que, a las cuatro, me fui para la cárcel. Pregunto en la entrada

 

¡Uy!, no sabemos, no se que, no se cuantas, espere en la cafetería...

 

La cafetería estaba cerrada. Me voy al coche y mientras espero observo las personas que acuden a comunicar, que vuelven de permiso, o que van al vis a vis. Mi conclusión es que el límite elástico de lo que cabe en la viña del Señor es sumamente grande. Y el del drama de la cárcel también: niños pequeños, abuelas, madres deshechas... el espectáculo no me seduce nada. Son las cinco y vuelvo a preguntar.

 

Ahora acaba de entrar el agente judicial que trae las notificaciones, espérese a ver...

 

A la media hora vuelvo, pero esta vez con mi carnet de abogado en la boca, y una copia del auto de libertad en la mano.

 

Entonces las cosas cambian un poco, la funcionaria coge el teléfono...

 

Sí; va a salir, y lleva bastantes cosas

voy a pasar el coche...

sí, entre

 

Ese segundo parking me resulta muy familiar. Es el que veo todos los domingos.

 

Me siento en el banco que hay frente a la puerta de entrada de cumplimiento. Intento imaginarme qué está pasando en el módulo. Creo que ese rato se me hace a mí mas largo que a ella.

 

Me voy para el funcionario. Está escéptico.

 

En la entrada me han confirmado que va a salir. Lo que quiero saber es a que hora aproximadamente

¡Hombre, no tienen hora, porque tienen que hacer muchas cosas... tienen que ir a huellar.

Pues nada, esperaremos...

 

Me vuelvo a sentar. El sol empieza a declinar, ya han cesado los tumultos de las comunicaciones. Se ha ido todo el mundo. El silencio es una losa como las de los muros... Me pesa. Aunque se el final, me pesa.

 

De repente se oye por los altavoces:

 

¡Ordenanza de exteriores acuda a …!

 

Ahí está ya, pensé. Y, efectivamente, al poco, unos brazos en alto me saludaban agitándose.

 

Ves bajando las cosas a la acera que voy a traer el coche hasta aquí

 

Descorrí el techo y le dije:

 

Quiero que veas el cielo...

 

Estaba feliz, tenía la cara colorada. Se pasó todo el viaje hablando; hablaba, hablaba feliz.

 

Cuando terminamos de bajar los paquetes del coche en la esquina de la casa de la amiga que la iba a acoger me acordé de la parábola del samaritano y el herido. Le di cincuenta euros y me fui. El domingo que viene ya no la veremos en misa, pensé.

 

Pero yo estaba equivocado. Mucho antes del domingo suena mi móvil:

 

Soy el comisario Gutiérrez, ¿Es usted el abogado de Berta?

Sí, ¿Que pasa?

No lo se, nos la tenemos que llevar a Madrid

¿porqué?

La reclama la Audiencia Nacional... hay una orden internacional de busca y captura, y nos tenemos que ir ya.

¿No me da tiempo a ir?

No.

Entonces, si es usted tan amable, le digo lo que le tiene que decir a la detenida, y se lo trasmite usted...

¡Hombre...!

Mire, tiene que decirle que diga que...

 

Al día siguiente suena mi móvil:

 

-¡Hola!, soy Berta, me han soltado, pero estoy en Madrid y no tengo como volver a Valencia.

 

Frustración y desesperanza. No conozco a nadie que la pueda ayudar en Madrid.

 

No se como, pero ella lo resuelve. Me dice si no me importa que su madre le mande dinero mediante una carta a mi despacho.

 

A través del procurador recibo el traslado a la Sala de Valencia de una diligencia de la Audiencia Nacional en donde muy confusamente dicen que Berta se ha ofrecido voluntariamente a comparecer ante la justicia de su país.

 

Inmediatamente presento un escrito refutando tal cosa y aclarando que ella no tiene intención de eludir la acción de la justicia de su país, pero que primero tiene que resolver las cuestiones pendientes en España, entre otras cosas porque el auto de procesamiento es anterior a la requisitoria internacional.

 

Por una vez en la vida, el Fiscal parece que me entiende y añade, además, que considera vital su testimonio para la causa, y por ello debe permanecer en España.

 

Vuelve a sonar mi móvil:

 

Estoy otra vez en Picassent....

Pero ¿Como es posible...? sin avisarme... sin nada...

No se porqué estoy aquí...

Iré a verte.

 

Yo ya tengo los cien euros que me ha mandado su madre dentro de una carta, pero como voy a verla como abogado, al locutorio, no puedo dárselos. Le digo que haga la instancia al Administrador de la  prisión para que me acepte como oferente de peculio, y se los ingreso.

 

La Audiencia Nacional acepta la prelación de la Sala de Valencia y la ponen en libertad.

 

La vista de su causa será el mes que viene. La condenarán a dos años, pero como estará pagada la responsabilidad civil, se le remitirá la pena.

 

Volverá a su país, que al ser de la Unión Europea, no la juzgará por los mismos hechos que han sido sentenciados en España, y su calvario habrá acabado.

 

En el departamento jurídico de la Pastoral Penitenciaria nos sentimos felices de haber ayudado a ello.

 

 

Mariano Jiménez
Abogado – Voluntario de SEPVAL

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Nos visitó Cristo sufriente

Fue la experiencia del mes de Agosto. Un auténtico regalo de Dios.
Aquel miércoles 8 Jesucristo visitó nuestro pueblo, Alfarrasí. Quien había afirmado “estuve en la cárcel y me visitasteis” ahora, en el grupo de internos del Centro Penitenciario de Valencia nos visitaba, acompañados por los padres Javier, mercedario, y Mariano, Jesuíta, y un grupo de voluntarios de la Pastoral Penitenciaria.
Y los chicos disfrutaron de nuestro pueblo, obedientes a sus acompañantes, pasaron la mañana y tarde en la piscina municipal, visitaron la Ermita de Colata, prepararon las peticiones y acción de gracias de la misa de final de ruta, cenaron en el patio de la Casa Abadía y a las once de la noche se acostaron para proseguir su peregrinar hasta la Capilla de la Purísima de Ontinyent.
Llevaban unos días caminando desde Benifayó y Alfarrasí fue el último hogar donde durmieron en libertad, libres de los prejuicios que muchos tienen hacia los que se hallan en la cárcel, sintiéndose amados por todos, tratados como uno más.
Esta es la grandeza de la Iglesia. Mientras la sociedad pide endurecimiento de las penas, la Iglesia los mira como hijos de Dios y trata de ayudarles y aliviar el terrible sufrimiento que es la cárcel, separados de sus seres queridos.
 
Valga la gratitud hacia la Pastoral Penitenciaria de nuestra Archidiócesis por acercarnos a Cristo sufriente.


P. José Andrés Boix,
rector de la Parroquia de San Jerónimo de Alfarrasí

martes, 4 de septiembre de 2012

MISA FUNERAL DEL P. XIMO

El próximo día 14 de septiembre de 2012, viernes, a las 20 h. en la Parroquia Nuestra Señora del Puig de Valencia de los Religiosos Mercedarios, situada en la Plaza Vicente Iborra, 1, el Sr. Obispo Auxiliar de Valencia, D. Enrique Benavent, presidirá, al cabo de un mes, la misa funeral por el P. Ximo (D. Joaquín Montes Mollá).
 
Están todos invitados.
 
Pido confirmación a las autoridades penitenciarias, civiles y judiciales por tal de reservarles un lugar en el templo parroquial, si así lo desean.
 
Agradecemos por adelantado su presencia y oración y rogamos hagan la máxima difusión para que todos los que no pudieron estar en su despedida en agosto lo puedan hacer ahora.
 
Atentamente,
 
Fray Javier Palomares Peña, O. de M.
          Director del SEPVAL

Siempre BIEN, P. Ximo

Sempre bé! Ha sido la frase más repetida de nuestro querido P. Ximo cuando cualquiera se interesaba por él. Y creo que es la frase que puede resumir su vida: ¡SIEMPRE BIEN! Siempre haciendo el bien, haciéndolo bien, estando bien con todos, gozando y difundiendo el Bien…


En la vida el Señor nos va poniendo personas que nos ayudan a caminar, a avanzar en nuestra vocación, a replantearnos cosas importantes y profundas de nuestra existencia, de nuestro compromiso cristiano, a mirar más allá de lo que nuestros temporales ojos alcanzan… El P. Ximo es ese tipo de persona que ha sido capaz de aportarme todo eso.
 

Para mí ha sido un privilegio compartir con él muchas horas entre rejas, muchos trayectos Valencia-Prisión (donde nos medio confesábamos), celebrar la fe a su lado, celebrar la vida en nuestras convivencias, escuchar sus santos consejos en nuestras reuniones (la voz de la experiencia). Hacía fácil lo que humanamente parecía imposible. Era capaz de bajar el Cielo a esta, muchas veces, ardua y reseca Tierra.
 

Para los privados de libertad fue siempre una palabra de esperanza, una ayuda espiritual, la caridad personificada. Fue todo oídos. Nunca recriminó nada a nadie. Miró desde su corta estatura a todos por igual, especialmente a los que «robaron» su gran corazón: los más «hechos polvo», los que nadie quería saber nada de ellos, los presos enfermos terminales, los enfermos mentales… apostando por ellos, jugándosela por ellos. El P. Ximo ha sido todo para ellos ganándose el título de «Padre de los presos».
 

Desde dar un consejo, rezar el ángelus a las 12, facilitar ropa y algo de dinero a los indigentes, localizar abogados para que se preocupen por sus clientes, facilitar el acercamiento incluso el perdón y la reconciliación del preso con su familia, apostar por algunos reclusos ante el Juez de Vigilancia, interceder ante los jueces de instrucción y penal, recaudar donativos para mantener en pie esta gran obra que la Iglesia diocesana lleva adelante, abrir nuevos caminos, sembrar para que otros recojan, presidir la Eucaristía, los oficios en los tiempos fuertes, confesar…
 

Todos le queremos: presos, funcionarios, jueces, abogados, fiscales, sacerdotes, voluntarios, familias… En la diócesis de Valencia muchos le conocían. Creo que ha sido una figura importante en el ámbito social y, sobretodo, ha enriquecido con su testimonio esta diócesis de Valencia.
 

Son muchas anécdotas. Son muchos recuerdos en tan poco tiempo. Pero siempre recordaré a ese hombre de Dios, bendecido y bendiciendo, con muchas teclas de salud tocadas pero con la fuerza sobrenatural para ser fiel a la misión que Dios le encomendó. Con una sonrisa siempre a punto. Con sentido del humor (me recordaba al P. Bienvenido Lahoz, O. de M., al P. Juan Carlos Fortón…). Tenaz. Lo que se proponía lo conseguía. Incansable. Sorprendente, con mucha frescura, persona equilibrada, responsable… Tomándose en serio las cosas de Dios. Luchador por tener al Santísimo en la prisión: el preso más famoso de la historia tiene una celda en la prisión, lugar de su reposo y fuente para tomar fuerzas.


Hoy queremos seguir adelante abriendo nuevos caminos de liberación. Queremos seguir potenciando y acrecentando lo que él, con tanto esfuerzo y sacrificio, fue sembrando. Orgulloso recojo el testigo pero a la vez temeroso de no dar la talla. Pido, finalmente, que desde el gozo de experimentar la libertad absoluta el P. Ximo siga bendiciendo la labor de la Pastoral Penitenciaria, a los funcionarios y a todos aquellos que por el motivo que sea se encuentran privados de libertad.
Fray Javier Palomares, O. de M.
Director del SEPVAL

jueves, 30 de agosto de 2012

Peregrinación Prisión - Ontinyent

Lo mejor de todas las experiencias adquiridas en el desarrollo de la Peregrinación, ha sido la fraternidad que se ha ido desarrollado entre todos los componentes de la misma y la desaparición de las “poses” con que a priori  venían algunos, adquiridas tal vez por la necesidad de aparentar una dureza o distanciamiento, que poco a poco ha ido desapareciendo convirtiéndose al final en un grupo de amigos que nos ayudábamos unos a otros en todas las actividades que diaramente hemos ido llevado a cabo.
 
La experiencia ha sido enriquecedora para ambas partes, los internos han comprobado como en las diversas estaciones que diariamente se llevaban a cabo desde el punto se salida y el de llegada, en las que personas ajenas a la Pastoral nos atendían altruísticamante para hacer más llevadera nuestra Peregrinación, tanto facilitándonos bocadillos, refrescos, utilización de piscinas y edificios en los que pernoctar así como también compartiendo con nosotros, ellos y sus familias, en todo momento y sin hacer distinciones entre los que componíamos el grupo, todo ello como demostración de lo que es la Caridad Cristiana. 
 
En los voluntarios, en la reafirmación cada vez más profunda, que vale la pena trabajar por la reinserción social del privado de libertad desde una perspectiva humana y sobre todo cristiana, la cárcel es una realidad muy desconocida para la sociedad y la Pastoral Penitenciaria impulsa una nueva mentalidad y su acción nace de la fe en Dios para quien nadie está definitivamente perdido, presentando un camino de libertad y esperanza, de reconciliación y perdón, de comunión e integración, de animación y de promoción. 
 
Todo ello no hubiera podido llevarse a cabo sin la colaboración del Centro de Inserción Social de Valencia, la prisión y la actuación conjunta de las tres áreas que componen la Pastoral Penitenciaria como son: Religiosa, Jurídica y Social, que tratamos de humanizar los lugares de privación de libertad apostando por los más pobres y débiles con la visión de la Iglesia diocesana trabajando por los privados de libertad, sus familias y las víctimas. 
 
Impresionaba con qué fe y decisión llevaban los internos la Cruz del Peregrino  desde la Ermiteta (donde recibimos el “pack” del Peregrino todos los asistentes) hasta la Parroquia de Santa María, pasando por cada una de las estaciones que se contemplaban en el desarrollo del acto oficial de la Peregrinación en Ontinyent.
 
Mención aparte merece sobre todo la despedida en Benifayó al final de la Peregrinación que compartimos con algunas de las familias de los internos, en que cada uno de nosotros se reincorporaba a su destino anterior a la misma, en la que los sentimientos afloraron y desapareció la coraza que pudiera quedar en alguno, cuando más duro aparentó ser, más sentimiento se demostró en la despedida, en la que todos fuimos deseándonos lo mejor e individualmente los que regresaban al centro, agradecían el trato personal que habíamos tenido con cada uno de ellos y con lágrimas en los ojos (en ambas partes)  nos dimos las gracias tanto por habernos demostrado que la dedicación a los privados de libertad vale la pena como por haber comprobado ellos que la Iglesia cree en el ser humano y que apuesta por la reinserción social, que para Dios no hay nadie definitivamente perdido.

             Paco Arcís, peregrino y Voluntario del SEPVAL

lunes, 27 de agosto de 2012

Gracias amigos peregrinos

            Han pasado ya algunos días desde que finalizó la misma, pero la sensación de cercanía y las vivencias que tuve con cada uno de los participantes no serán fáciles de olvidar.
             Por circunstancias ajenas a mis deseos no pude caminar con el grupo todo el tiempo y tuve que seguir en el vehículo de apoyo, al principio me decepcioné un poco, pero luego pensé que la Providencia lo quería así. Estoy segura que pude percibir un poco más si cabe y valorar el esfuerzo que todo el grupo, sin distinción, hacía por seguir adelante, ayudándose en todo momento.
             Mención aparte fue la acogida en los distintos sitios donde hemos ido, me impactó mucho la comida de Carcaixent, ofrecida por la Comunidad Cooperadores de la Verdad que viven de la caridad y la compartieron con nosotros.
             La Providencia se ha hecho presente en cada uno de los sitios por donde hemos ido pasando, con el cariño que nos recibían con las ganas que tenían de poder ayudarnos a que nuestra breve estancia con ellos fuera inolvidable como así ha sido para mí.
             Qué decir de los chicos, al empezar yo pensé: SEÑOR, AYÚDANOS; y al terminar: GRACIAS, SEÑOR, por todo lo bueno que me has regalado en estos días.   
             PEPITA BELTRÁN, Voluntaria de Pastoral Penitenciaria


martes, 21 de agosto de 2012

Personas sin libertad

Hombres justos pocos hay, personas justas alguna habrá, Joaquín Montes sin duda lo fue, su conducta ejemplar, un cuento que contar, una historia que narrar, su vida habrá que relatar y al lector embriagará.
En el seno de una familia humilde nació Joaquín, en su Ontinyent natal creció y algún tiempo vivió y cuando sacerdote se ordenó a Valencia llegó y en la cárcel de Picassent se quedó.
Con su gran y humilde corazón a los presos conoció, su familia ellos, sus plegarias para ellos, su fuerza espiritual con ellos. Cuando hablaba de los presos de Picassent nunca se refirió a ellos como delincuentes, asesinos, drogadictos u otros adjetivos, sólo eran los presos, sus presos, a los que tenía que cuidar y acompañar.
Cada día y durante más de 40 años ha conocido la realidad del sistema penitenciario desde un punto de vista más humano, más cercano, más empático. Los presos para él “personas sin libertad, equivocadas en sus caminos, sin suerte en sus destinos”, la mayoría pobres, sin recursos, pagando sus penas entre rejas a veces justas y en ocasiones tal vez injustas.
Su casa llena de cuadros de los presos, dibujos de los presos, escritos de los presos, poemas de los presos, fotos con los presos, todo vivencias con ellos, sus amigos, sus compañeros, sus confidentes y él su consejero y ahora desde el cielo velará por ellos.
Joaquín pura riqueza humana, calidad en su alma blanca, tus enseñanzas nos dejas y con mucha pena de nosotros te alejas, pero seguro que donde estés no habrá presos ni rejas, sólo amigos y estrellas y riendo con tu querida hermana Lola debes estar ahora.  
Tu voz echaremos de menos, tu mano ya no estrecharemos, tu abrazo lo añoraremos, pero tu sonrisa en nuestro corazón con llave muchos la guardaremos.
Hasta pronto amigo Ximo.


María Elena Martínez,
amiga del P. Ximo  

lunes, 20 de agosto de 2012

De diferentes a 'amiguitos'

“Si juzgamos a la gente no nos queda tiempo para amarlos” (Beata Teresa de Calcuta)

 “Andar 20 kilómetros diarios”, algo que no me resultaba nada atractivo. Sin embargo, tras esto existía un deseo enorme de compartir esta experiencia. Personas muy diversas, ‘jergas’ muy distintas, prejuicios por medio (por qué negarlo)… y en tan solo unos días hemos pasado a ser de completos desconocidos a, como bien dijo un grande, buenos “amiguitos”.

“¿Qué me diferencia a mí de una persona privada de libertad?”, después de esta peregrinación puedo decir que absolutamente NADA. Ellos han cometido errores, yo los sigo cometiendo, ellos se han fallado a sí mismos, yo lo hago cada día. Somos personas humanas, y de eso nadie puede privarnos.

                En estos días me he encontrado con gente entregada completamente a los demás, sin esperar nada a cambio: El grupo de voluntarios, los capellanes, y por supuesto todas aquellas personas que nos acogieron, alcanzando incluso el límite de sus posibilidades, con el fin de que estuviéramos bien atendidos. Es en estos momentos, en la entrega desinteresada, cuando se ve la presencia de Dios en cada persona. Aunque, personalmente, lo que más me sorprende es la presencia de Dios en los usuarios, en sus “niños”. Porque a pesar de la posible fachada que han estados ‘obligados’ a crear, se encuentra en cada uno de ellos un corazón con una bondad enorme, que únicamente procede de Dios. Como todos, necesitan recibir ese tipo de amor, y en la experiencia se ha visto reflejado como, ante tal afecto, han regresado con un brillo diferente en sus ojos.

Estoy completamente agradecida a todas las personas que de alguna forma han formado parte de esta peregrinación. Para mí ha sido una experiencia muy importante, he aprendido a mirar con otros ojos, a empatizar con quienes no son como yo, pero sobre todo a querer desde el corazón a los demás. Muchísimas gracias.
Lucía H., la pequeña del grupo
Voluntaria del P.O.P.-Bienvenido Lahoz, O.de M.

sábado, 18 de agosto de 2012

Peregrinación 'Caminos de Libertad 2012'

La Capellanía Católica del Centro Penitenciario de Valencia y C.I.S.  «Torre Espioca» viene desarrollando diversas actividades y celebraciones con los internos de ambos centros a lo largo de todo el año. Aprovechando el tiempo de vacaciones hemos querido organizar una peregrinación diocesana para premiar a estos reclusos que participan de la vida de la Capellanía.

Nos hemos puesto como meta la ciudad de Ontinyent ya que coincide que este año es Año Santo Jubilar de la Purísima, patrona de la ciudad. Saldremos caminando desde el recinto Penitenciario hasta Benifaió. A partir de ahí seguiremos las etapas: Benifaió-Carcaixent; Carcaixant-Xàtiva; Xàtiva-Alfarrasí; Alfarrasí-Ontinyent y regreso al recinto Penitenciario. Seguiremos la ruta del Cid en su Defensa del Sur. En las poblaciones que lleguemos nos alojaremos en parroquias y realizaremos diferentes actividades lúdicas, deportivas y religiosas.

Crónica de una ruta de fe y compromiso.

DOMINGO 5: recinto penitenciario – Benifaió___________________________________
A las 17 h. quedamos en el aparcamiento del recinto penitenciario de Valencia con los internos del C.I.S. ‘Torre Espioca’.

Un capellán y un voluntario entra al módulo 31 para acompañar a los internos del Establecimiento Penitenciario (hora de salida prevista: 18 h.) en su salida al exterior.

Nos unimos todos y nos presentamos.
Oración de inicio en el mismo aparcamiento.

Salimos caminando del recinto Penitenciario dirección Benifaió (4 km, 45 minutos).

19 h. Llegada a la casa Abadía, acomodación, ducha.

20’00 h. Misa de envío en la iglesia parroquial.

21 h. Cena (ofrecida por Cáritas de Benifaió, voluntarios/as de la parroquia de San Pedro).

22 h. Recoger y oración de Buenas noches.

Se dan indicaciones para el día siguiente.

22’45 h. Descanso.



LUNES 6: Benifaió –Carcaixent_______________________________________________
5’30 h. Aseo rápido, desayuno, recogida de las mochilas y colchones.
6 h. Oración de Buenos días.
Salida hacia Carcaixent.

8’45 Algemesí: (12 km) Almuerzo en los locales (Patronat) de la Parroquia de Sant Jaume, ofrecido por voluntarias de Cáritas y un miembro de la Nova Muixeranga de Algemesí.












11 h. Alzira: (6 km) refresco en el Colegio la Inmaculada, ofrecido por la Comunidad de Religiosas Franciscanas de la Inmaculada.

12’30 h. Llegada a Carcaixent (4,2 km), nos acomodamos en el Polideportivo que nos cede el Ayuntamiento de Carcaixent.

Piscina.



14 h. Comida en el polideportivo. Ofrecida por la comunidad de Cooperadores de la Verdad.
Descanso.

16 h. Taller 1: colgantes, papiroflexia y juegos africanos.

17’30 h. Piscina.

19 h. Ducha.
19’30 Minutos con Dios: preparación de la eucaristía y ensayo de cantos.




20’15 h. Cena: tortilla de patata, tomate, sobras + fruta.

21 h. recoger y oración de Buenas noches.

22 h. Descanso.

MARTES 7: Carcaixent - Xàtiva_______________________________________________

5’30 h. Aseo rápido, desayuno, recogida de las mochilas y colchones.

6’15 h. Oración de la mañana ‘Buenos días’.

Salida hacia Xàtiva.

7’45 h. La Pobla Llarga: (6,2 km).

8’45 h. Manuel: (4,5 km) Almuerzo en el bar Sardi de la Sra. Pilar (miembro de Cáritas) que nos invita a la bebida; almuerzo ofrecido por Cáritas (referencia: madre de José Sra. Conchín; párroco: D. Vicent (Parroquia de Santa Ana).

12’15 h. Llegada a Xàtiva, (13 km) nos acomodamos en la parroquia del Carmen.

12’45 h. Piscina.

14 h. Comida, ofrecida por las comunidades neocatecumenales de esta parroquia.
Descanso.

16 h. Actividad: Taller 2: marco de foto.


17’30 h. Piscina.
19 h. Ducha (en las instalaciones de la piscina).




20 h. Minutos con Dios: preparación de la eucaristía y ensayo de cantos.

21 h. Cena, ofrecida por las comunidades neocatecumenales de esta parroquia.

21’45 h. recoger y oración de buenas noches.

22’30 h. Descanso.

* La Parroquia del Carmen nos deja preparado el desayuno y el almuerzo del día siguiente.
MIÉRCOLES 8: Xàtiva -Alfarrasí_____________________________________________
5’30 h. Aseo rápido, desayuno, recogida de las mochilas y colchones.

6’15 h. Oración de la mañana Buenos días.
Salida hacia Alfarrasí.

8’30 Bellús: (10 km) Almuerzo.

11 h. Llegada a Alfarrasí, (6,3 km) nos acomodamos en la casa abadía de la Parroquia de San Jerónimo, C/Mayor, 1.
Acomodación.

12 h. Piscina y tiempo libre.

14 h. Comida en la piscina ofrecida por el párroco de Alfarrasí, D. José Andrés Boix.
Descanso

16 h. Visita a las ermitas: Santísimo Cristo de la Agonía (Alfarrasí) y Virgen del Loreto (Montaverner).
Piscina.
Ducha (en las instalaciones de la piscina).

19 h. Minutos con Dios: preparación de la Eucaristía y ensayo de cantos.

20 h. Cena.

21 h. Recoger y oración de ‘buenas noches’.

21’30 h. Descanso.












JUEVES 9: Alfarrasí –Ontinyent – Benifaió_____________________________________
4’30 h. Aseo rápido, desayuno, recogida de las mochilas y colchones.

5’15 h. Oración de la mañana ‘Buenos días’.
Salida hacia Ontinyent.

8 h. Almuerzo por el camino (intendencia peregrinación).

10 h. Llegada a Ontinyent (18 km).
Ducha en el Polideportivo Municipal de la ciudad (vamos de parte del Regidor de Deportes).

11 h. Rito de la Peregrinación en la Ermiteta: nos recibe el P. Melchor, párroco de Santa María y preside D. Enrique Benavent, Obispo Auxiliar de Valencia. La Parroquia de Santa María nos regala el pack del peregrino a todos los asistentes.

12 h. Eucaristía: presidida por D. Enrique Benavent; concelebran los PP. Melchor, José Andrés, Antonio, Josep, Mariano y Javier.

Visita a la iglesia y torre campanario (por un miembro de la Colla de Campaners).

Refresco en el colegio de las Hijas de la Caridad ofrecido por la comunidad de religiosas.

14 h Comida en el Casino de Festers.

15’15 h salida en coche hacia la estación de RENFE.

15:46 sale el tren Ontinyent-Xàtiva.

16:47 sale el tren Xàtiva-Benifaió.

Llegamos a las 17’15 h a Benifaió.

17’30 h. Evaluación en la abadía de Sant Pere de Benifaió.
Tiempo libre

19 h. Merienda-cena, ofrecida por Cáritas de Benifaió, voluntarios/as de la parroquia de San Pedro.

20 h. Salida hacia el Centro Penitenciario en coches y entrada de los internos de 2º grado.

En Benifaió con los de 3r grado: paseo nocturno y dormir.










VIERNES 9_________________________________________________________________
9 h. Buenos días, aseo, desayuno
10’30 h. Recogida del material usado y limpieza de la casa abadía de Benifaió.
            Devolver materiales.
13 h. Comida y vuelta a casa